En esta época en la que internet es dios, juez y parte, la única frontera que nos separa de la producción audiovisual de Asia Oriental es el botón del WiFi. Basta con chequear la cantidad de propuestas que ofrecen los servicios de streaming para confirmarlo.
“Desde hace dos años (e impulsadas luego por la pandemia) las grandes productoras se han animado a romper con la rigurosidad de sus catálogos regionales. El resultado fue que un montón de contenidos limitados por nuestra geolocalización se encuentren ahora disponibles en Hispanoamérica”, comenta el licenciado en cine Agustín Carrizo.
Un buen espectador sabe salir de su zona de confort. ¿Qué tal si este fin de semana optás por algún título de origen asiático?
Desde Japón
Al margen del cine de animación, el rubro del entretenimiento nipón incluye los doramas. El término refiere a las series en imagen real y para muchos es un nicho por explorar.
“Las tramas de terror y thrillers psicológicos son los mejores y en HBO GO y Amazon Prime Video hay cortos bastante tenebrosos inspirados en leyendas urbanas o maldiciones. También es notable el avance de los animes en Netflix, con producciones originales o la subida de clásicos de los 80 y 90”, afirma Agustín.
Lo lejano nos engancha y es el punto de partida para conocer otras filosofías de vida. “El atractivo de las producciones japonesas reside en la forma de contar las historias. Además la cultura oriental tiene muchas mitologías, creencias y leyendas que la hacen llamativa. Por otra parte, hay terminologías que en español no existen o festejos (por ejemplo, San Valentín y Navidad) que se celebran distinto”, explica la profesora de Idioma Megumi Ishimine.
Según nuestro fanatismo, con el tiempo podremos pasar de la extrañeza a distinguir acciones románticas típicas. “Hiza makura es cuando dejás que tu pareja se acueste en tus piernas (como si fuera una almohada). Y Ai ai gasa se llama a la escena en que dos personas comparten el mismo paraguas”, detalla la docente de Tucumán Nigonho Gakkou.
Otra escena derrite corazones es el kabe-don: momento en el cual un protagonista masculino arrincona a la chica (de manera íntima) contra la pared, apoyando una mano sobre el muro.
Para adentrarnos en el mundo del anime el mejor portal (vía suscripción) es Crunchyroll.
Hecho en Corea
Ya sabemos que la avalancha del pop coreano llena estadios, pero en la pantalla chica lo que priman son los k-dramas.
“Las series surcoreanas son el paraíso para quienes disfrutan de las tramas amorosas con final feliz. En el marco de una política de expansión cultural (vigente desde mediados de los 90), Corea del Sur destina un gran presupuesto estatal para que las compañías produzcan y difundan contenidos multimedia”, afirma la seguidora Guillermina Romero.
En estos productos la apuesta estética y las escenografías son dignas de alabanza. No obstante, la atención de los espectadores primerizos suele dirigirse al cambio en las representaciones de afecto y los límites en el contacto físico.
“Si estás harto de las escenas sexuales explícitas, el vocabulario obsceno o las relaciones violentas, los k-dramas son la opción perfecta. Acá hay instancias de pura comunicación entre miradas, besos castos, primeros planos de manos enlazadas y diálogos que te estrujan el estómago”, describe Guillermina.
Ya experta en el amor dentro de la península extranjera, la estudiante destaca dos curiosidades. “Hay algunas series en las cuales el/la protagonista invita a su pareja a casa a comer ramen. En realidad, este diálogo es una propuesta para mantener relaciones sexuales o intimar. Otro gesto frecuente es el finger heart (armar un corazón con el pulgar e índice) para decir te quiero”, relata.
La experiencia China
De a poco, las novelas chinas han sabido alzar su voz para traernos ficciones con personajes de cabello largo y pulcros atuendos tradicionales.
Los géneros son bastantes variados. “Por nombrar algunos tenemos el wuxia (’héroes de las artes marciales’). Las historias generalmente se desarrollan en la Antigua China y se enfocan en personas dedicadas a las artes marciales como el kung fu y al cultivo de energía espiritual (como el Qi/Chi)”, comenta la estudiante universitaria Rocío Corbalán.
Aparece también el xianxia (“héroes inmortales”). “Este género es un tipo de fantasía alta y su base es el taoísmo. Podemos encontrar dioses, demonios, magia, espadas voladoras y cualquier elemento sobrenatural relacionado con la mitología china”, agrega. Y le sigue el xuanhuan (“fantasía misteriosa”), que combina la mitología de la propia nación con ciertos elementos occidentales.
Con una gran recepción de público, la tendencia es adaptar las tramas literarias. “Netflix cumple un rol fundamental porque comenzó a subir donghuas (series animadas chinas) a su portal en la región. Sumado a que arrancó a publicar live actions de novelas danmei (el término alude al BL o romance entre chicos y son bastante populares)”, reflexiona Rocío.
Un par de recomendaciones son “La bendición oficial del cielo”, “Eternal Love” y “El gran maestro del cultivo demoníaco” (“Mo dao zu shi”).
Para ver el contenido
- Mangas, manhwas y mannhuas: podemos elegir los títulos que más nos gusten desde las plataformas Tu Manga Online (TMO) y Webtoon.
- Series: el servicio Rakuten Viki ofrece 14.000 opciones de doramas, k-dramas y películas. Otra propuesta es la plataforma de videos chinos iQiyi.
- Donghuas: hay bastantes animaciones en los perfiles de YouTube de los canales We TV y Bilibili.
- Novelas: el contenido se distribuye por Wattpad y en las páginas de Facebook gracias al trabajo de los equipos de scans y fansubs (traducciones gratuitas hechas por aficionados y sin fines comerciales).
Animés y mangas
Elegí el género que se amolde a tus gustos
- Shojo: apunta al público adolescente femenino y se centra en la amistad, el amor y el compañerismo. A veces también se mezcla con un poco de acción. Ejemplos: “Kimi ni todoke”, “Fruits basket” y “Sailor moon”.
- Mecha: aparecen robots enormes (en general) piloteados por humanos. Ejemplo: un anime clásico es “Evangelion”.
- Shonen: está pensando para los chicos, pero cualquier persona puede disfrutarlo. Se caracteriza por las escenas de acción con un toque de humor. Ejemplos: “Dragon ball”, “Naruto” y “One piece”.
- Yaoi y shonen ai: ambos plantean romances entre hombres. El yaoi contiene escenas sexuales mientras que el otro género es apto para todo público. Ejemplo: “Love stage” y “Yuri on ice”.
- Yuri y shojo ai: corresponde al amor entre mujeres. Igual que con la categoría anterior el yuri contiene escenas sexuales, pero el shojo ai no. Ejemplo: “Citrus”.
- Isekai: se refiere al hecho de transportarnos o reencarnar en un mundo nuevo (sea real o virtual). Ejemplo: “Re: zero”.
- Slice of life: alude a las experiencias cotidianas de los personajes. Este género trata de enseñarnos a apreciar las pequeñas cosas de la vida. Ejemplos: “Violet Evergarden” y “Anohana”.
- Gore: un género polémico por la violencia que muestra. Además de ver sangre esta categoría trae historias interesantes y con contenido psicológico e intelectual. Ejemplos: “Elfen lied”, “Tokyo ghoul” y “Parasyte”.
En Netlix
Dramas coreanos
1- “Love alarm” (de 2021).
2- “Mudanzas al cielo” (2021).
3- “Amor en la ciudad” (2020).
4- “Holo, mi amor” (2020).
5- “¿Era amor?” (2020).
6- “Aterrizaje de emergencia en tu corazón” (2019).
7- “Chocolate” (2019).
8- “El amor es un capítulo aparte” (2019).
9- “Bajo la lluvia” (2018).
10- “Porque esta es mi primera vida” (2017).
Dramas
Top 10 de series japonesas
1- “Alice in borderland” (estrenada en 2020).
2- “Ju-on: origenes” (lanzada en 2020).
3- “Seguidores” (2020).
4- “Tenemos un gran problema” (2019).
5- “Midnight diner: Tokyo stories” (2019).
6- “Suerte en el amor” (2018).
7- “The many faces of Ito” (2017).
8- “Million yen women” (2017).
9- “Good Morning Call” (2017).
10- “Beso travieso: amor en Tokio” (2013) y “Beso travieso: amor en Tokio 2” (2014).